Me gusta True Blood

Ya estuve hablando de esta serie en una página anterior de este mi libro y la verdad es que me reafirmo en que me encenta esta serie.

Ya he tenido el placer (es la mejor palabra que se me ha ocurrido) de ver la primera temporada completa y la verdad es que ya estoy ansioso de ver que les pasará a Bill Comptom, el encantador vampiro, y al resto del extraño reparto de personajes de la serie en la segunda y espero que más larga temporada.

Me refiero así a la "longitud" de la primera temporada porque tan solo consta de 12 capítulos que, si bien son suficientes para contar la historia que cuenta, abre muchas vias argumentales, tantas que como la segunda temporada y las posibles sucesivas no sean del doble de capítulos no se cuanto van a tardar en aclararlo todo.

Recomiendo encarecidamente que la veáis, sobretodo a aquellos a los que os mola el rollo chupasangre porque la verdad es que en el fondo son vampiros del puro estilo Mundo de Tinieblas.

Además, para los que no queréis o no os apetezca leer subtítulo muy pronto tendremos la serie en nuestras pantallas, previo pago, claro está, a través de Canal+ aunque de ese modo os perderéis el delicioso tono sureño de la serie, sobretodo teniendo en cuenta que últimamente los doblajes que se están realizando de series extranjeras dan casi más pena que asco.